Bienvenidos nuevamente al
blog de Psicólogos en Puebla, el día de hoy como se los prometí, les traigo la
continuación de mi entrada titulada “¡Hagamos una revolución!”, en donde voy a
proceder a explicarles los motivos por los cuales no estamos listos para
iniciar una revolución, así que comencemos.
En mi anterior entrada les
mencionaba, que tendemos mucho a confundir revolución con lucha armada, cuando
no específicamente tiene que ser así, si nos ponemos a reflexionar una lucha
armada traería inestabilidad económica, lo cual como país no conviene, además
habría retraso en campos como lo son la educación y la tecnología, pero bueno
¿Qué más acontece en la psique del mexicano para poder atreverme a decir que no
está listo para ejercer una revolución de cualquier tipo?. Bueno, pues a
continuación voy a intentar explicarlo brevemente:
1.- Revolución=Lucha armada:
Este es mi primer punto, la mayoría de los mexicanos piensan y asocian una
revolución con una lucha armada yo sé que hay también un buen porcentaje que no
piensa así, pero la verdad últimamente he visto que aquellos a favor de las
armas ocupan un porcentaje mayor. Si no me creen les invito a buscar páginas en
Facebook de acción política o donde se informa cada una de las marchas que hay
en el país, una vez que encuentren una lean los comentarios de las fotos y se
darán cuenta que efectivamente un gran porcentaje incita a el uso de la
violencia y las armas.
2.-Pensamiento de masas:
¿Han escuchado alguna vez hablar de psicología de las masas? En caso de que no
se los explicaré brevemente; uno de sus mayores exponentes es LeBonn quién nos
explica el peligro de las masas. De acuerdo a este autor una masa es un
conjunto de personas las cuales se han unido durante un breve tiempo para un
fin específico (por ejemplo una manifestación), ahora el problema no radica en
que se unan, el verdadero conflicto inicia cuando se dejan llevar por lo que
están haciendo en ese momento y pierden su pensamiento individual para volverse
un pensamiento colectivo en donde se creen invencibles por el simple hecho de
ser muchos. En pocas palabras es lo que conocemos como la famosa efervescencia,
que sin saber muy bien por qué o cómo terminamos actuando como la demás gente del
grupo. Un ejemplo muy claro de esto es lo que sucedió el año pasado cuando en
una manifestación se quemó el árbol de Coca-Cola ¿Alguien de los que dirigió
ese acto pensó en que probablemente el incendio se podía salir de control y
lastimar a alguien? Al parecer no.
Este pensamiento de masas es
lo que domina muchas de las manifestaciones, yo sé y estoy muy consciente que
hay un buen porcentaje que la hacen de manera pacífica y verdaderamente se los
aplaudo, pero no pueden negar que hay otro tanto que “actúa” contra el gobierno
dañando propiedades o negocios y mientras no se quite eso tampoco podemos
hablar que una revolución funcione.
3.-Conformismo: Este punto
es esencial en la psicología del mexicano, el conformismo. Y es que aunque hay
muchos que se esfuerzan por cambiar la situación del país, también hay otro
tanto que considera que si no le afecta las cosas se pueden quedar así. Por
ejemplo: tenemos a los 43 estudiantes de Ayotzinapan, hay muchas personas que
están indignadas con lo que sucedió, pero también hay otro tanto que aunque
piensen que está mal realmente no les produce ningún otro tipo de malestar,
consideran que si es terrible lo que sucedió pero que mientras ellos estén bien
pues prácticamente no sucede nada. El día que dejemos de conformarnos con la
manera en que vivimos o en estar “pasándola”, vamos a dar un gran salto en
nuestro pensamiento y probablemente para entonces podríamos empezar a generar
una revolución en nuestras ideas.
4.-Hacer más de lo mismo: Y
aquí caemos todos prácticamente, ¿Han escuchado que no hay que tropezar dos
veces con la misma piedra? Pues aquí se podría aplicar. En psicología cuando un
paciente nos llega, indagamos que es lo que está haciendo para resolver su
problema y lo motivamos a encontrar otra alternativa de solución ya que la que
usa no está funcionando. Lo mismo aplica para nuestro país, hacemos marchas,
nos manifestamos, y la mayoría está de acuerdo que es un mal gobierno pero ¿Qué
ha cambiado?.Los políticos siguen en sus puestos y al parecer estarán ahí por lo
que resta de su mandato. Realmente y conscientemente nuestras manifestaciones y
protestas no los hacen temblar, porque ya saben cómo manejarlas e incluso se
las esperan ya que siempre hemos hecho lo mismo. No digo con esto que hacer
manifestaciones y marchas esté mal, pero si queremos generar un cambio hay que
hacer algo diferente y totalmente novedoso que nuestros líderes no se esperen y
que no afecte de manera negativa a los demás.
5.-Marchas muertas: Y bueno
con esto me refiero a que tenemos miles de marchas pero todas siguen un ciclo
de vida vital. Surgen por algún descontento, ganan adeptos, hacen movimientos y
al final van desapareciendo. En nuestro país a habido miles de movimientos,
pero al final se han extinguido haciendo parecer que sólo son de “moda”.
Tenemos como claro ejemplo a las muertas de Juárez, miles de personas en su momento
se manifestaron pero después se fue perdiendo el interés hasta que esos
movimientos o desaparecieron o perdieron su fuerza. No hagamos movimientos sólo
por seguir, al contrario si vamos a estar con ellos hay que mantenerlos y
continuarlos hasta lograr lo que se pide y no dejarlos ir.
6.-Falta de conciencia: Y
con esto de la marcha conviene hablar de la falta de conciencia e información
que tenemos. Seguimos las marchas y manifestaciones pero muchas veces no nos
informamos de que está pasando o de las opciones, vaya sólo nos unimos por
unirnos y reclamamos por reclamamos pero no nos tomamos la molestia de conocer
más sobre la situación. No hay que ser simples borregos.
Y bueno con este punto
finalizó mi entrada de hoy, ojalá les haya gustado y provocado reflexión, si
queremos un cambio primero hay que cambiar nosotros mismos, México es un país
hermoso y merece que luchemos por él. Gracias por visitarnos en Psicólogos en
Puebla, la siguiente semana nos vemos con más artículos relacionados con la
psicología social. ¡FELICES FIESTAS!
Si quieres leer la primera parte de este artículo da click aquí:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
COMENTA y EXPRÉSATE, TU OPINIÓN ES IMPORTANTE...